Todo se reduce a que soy vaga
Según el Capitan Escarlata, con quien me reencontre luego de un adormecido olvido, mis quejas existenciales no son válidas porque el problema real es que no me esfuerzo nunca por nada.
En el Principio fue el proyecto de huerta, pero no prendieron las verduritas como yo pensaba. Si bien la desilusión no fue mucha le dije -"me estafaste, tenes que cambiar" y nos mudamos. En esos momentos fue cuando le tomo el gusto a los contrastes; y lo que parecia una metamorfosis se convirtio en esta melancólica adicción al transformismo.
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